PENSAMIENTO MUSICAL
Decir que podemos ‘pensar en música’ implica que poseemos
ciertas categorías, esto es, determinaciones particulares de este tipo de
pensamiento, mediante las cuales aprehendemos los objetos musicales.
Las categorías del pensar musical corresponden a los elementos constitutivos básicos de la música: ritmo, tono, timbre y armonía.
- Mediante el ritmo otorgamos una regularidad subjetiva al flujo musical en su dimensión temporal, a partir de la sucesión y repetición de pulsos débiles y fuertes.
- La melodía se halla en la capacidad de aportar una coherencia lineal a una sucesión de sonidos de diferente altura.
- La armonía implica la unificación de la simultaneidad de los sonidos, mientras que el timbre nos permite juntar cualitativamente diversos armónicos en un solo sonido.
Los músicos utilizan más habitualmente ambos lados del cerebro. En estudios anteriores la creatividad siempre se ha enfocado al pensamiento divergente, que es la capacidad de realizar varias facetas de una misma actividad a la vez. De este modo, los individuos sumamente creativos a menudo muestran el pensamiento más divergente que sus colegas menos creativos.
Comentarios